El acto

Este es el último minuto de nuestro acto.
¿Como soporto el aterrador sonido de su adiós?
Mi acto, compartido, ha llegado a su fin...
Soy un actor inagotable, insaciable.

No supe saciarme de ti, eras más que eso.
En cambio yo no era suficiente.
Jamás supe creer en tu despedida, suplicándote
imaginando que algún día volverías.

Pero no volviste jamás.
Lo entiendo, nací para actuar, fingir, engañar.
Solo para conseguir tu cuerpo, nunca quise tu alma...

No quiero almas, no vivo de almas
solo un jornal quiero ganar,
solo una cama, quiero llenar...

He nacido en este acto,
amo mi desgracia hasta el último poro de mi piel.
No me ahoga ser un monstruo,
no me ahoga la llave que encierra mi desagradable reflejo.

No te he amado, nunca lo hice...

Solo quiero olerte, besarte,
abrazarte, que nos estorben nuestros propios huesos.
Enganchado a tu sonido.

Escogí este camino que tanto adoro,
y aun siendo un verdadero egoísta,
desde que lo dijiste, desde que te despediste
¿Por que ya no duermo tranquilo?

¿Estas ahí?