Tiempo de tomar decisiones duras, tiempos para ilusionarse de nuevo, coger una barca y remar.
Hay cosas que no tienen importancia y las hay que importan pero justo lo que queramos que importe. Una buena amiga me aconsejó que no explotara como hice ayer... que o soltaba lo que tengo dentro o me haría muchísimo daño.
Me sentí bien dejándome llevar y al ver la ausencia me retiro, con la certeza de que arriesgué y fui valiente.
Estoy en la estación y el tren se marcha. Sólo quería conocerle, sólo hablar, sólo caminar, quizás cantar alguna de esas canciones. Me voy, todo está muy claro.
Y si veo que el infinito me agobia, no te llamaré
No hay comentarios:
Publicar un comentario