Insomnio

Es normal, siempre me pasa en los viajes y más si hay avión de por medio.
No maldigo que sean las tres y cuarto y no pueda dormir, me encanta esta sensación.

Cumplir sueños, a veces ocurre, perdí la cuenta de los años que he pasado queriendo conocer Italia. Cuando tenía diecisiete (hace ya algunos añitos) estuve a punto de rozar con los dedos mi sueño pero el factor sorpresa no me permitió ahorrar en tan poco tiempo y se me quedó la espinita. No sería el momento y ahora lo es, sin duda.

Señores, volver a estudiar a los 23 años fue, sin duda, la mejor decisión que he podido cumplir. No creía ni en mí ni en mis espectativas de éxito, y ahora me daría muchos cosquis.

Me ha dado conocimientos, no solo teóricos y prácticos. He aprendido algo de todas y cada unas de las personas que he conocido (a veces bueno, a veces malo). A veces cuando la palabra "crisis" se limita a lo personal puede significar "oportunidad", a veces "diferente" no tiene que ser "contrario", ni "agradar" implica ser "agradable". Me ha devuelto la vida, solo por eso mereció la pena...

Y tras tantas oportunidades y casualidades, venía la más esperada, ¡Un viaje! ¿a Roma? ¡Claro que sí!. Apenas un mes para prepararlo todo, exámenes hasta 3 días antes...

No me importa perder el sueño si en horas voy a cumplir uno, si seguiré soñando como siempre, quería compartir que por fin se ha cumplido. Pedazo a pedazo vuelve a formarse el puzzle.

Perdón, se me olvidaba mencionar el reencuentro amoroso... con mi cámara, aquella que intenta guardar lo que veo.

Volar de día, dormir con mis niñas, risas, emociones... ¡Parezco una niña!

Casi las cuatro, por lo menos cerraré los ojos...